27 Dic DEVOCIONAL
Salmo 18. 37-45
La novena estrofa, David resalta a Dios como quien le da fuerzas para vivir, sus capacidades, quien doblegó a sus enemigos, quien lo libró durante toda su vida, es Dios quien le dio autoridad, quien lo hizo líder y juez, fue Dios quien lo puso donde está, le da sabiduría y le enseña lo que debe hacer y el camino a seguir.
Cuando Dios ocupa el centro de nuestra vida, la óptica con que se ve la historia es diferente. No se cuanto has recorrido, pero hoy es importante ver para atrás, descubrirás que has pasado por tormentas duras, has enfrentado cosas negativas, pero tu visión de Dios, la forma como lo conoces hace la diferencia. Revisa tu forma de ver a Dios, Él es tu protector, no importa lo difícil que haya sido cualquier experiencia vivida, ahora estas aquí, leyendo este devocional, mira a Dios en cada paso de diste, las cosas pudieron ser terribles.
Pero como dijo Pablo en 2 Corintios 4.8-9 “…aunque llenos de problemas, no estamos sin salida; tenemos preocupaciones, pero no nos desesperamos. Nos persiguen, pero no estamos abandonados; nos derriban, pero no nos destruyen.” O como lo dice en Reina Valera, que suena más poético “estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados; perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos.”
David nos dice lo mismo en el Salmo 18, paso por todo eso, pero Dios estuvo ahí. Siempre podrás ver que Dios estuvo ahí. Aquellos que se concentran en buscar los culpables de lo que le pasó ayer, no ven hacia el futuro, no crecen, su corazón siempre tiene reproches hacia los demás, siempre tratan de manipular lo que está pasando y lo peor no vive el presente. Dios está al tanto de tu vida, no lo dejes.
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